¿Qué hace la correa de distribución?
La correa de distribución sincroniza el movimiento entre el cigüeñal y el árbol de levas. De este modo, las válvulas se abren y cierran en el momento justo, sin interferir con los pistones. Si esta sincronización falla, las piezas pueden chocar entre sí, provocando daños muy graves en el motor.
En algunos modelos de coche, esta correa también mueve otros componentes, como la bomba de agua. Su trabajo es silencioso, pero absolutamente esencial.
¿Cada cuánto tiempo se debe cambiar?
El intervalo varía según el tipo de motor, el uso que se le dé al coche y las recomendaciones del fabricante. En general, se recomienda sustituir la correa de distribución entre los 60.000 y los 150.000 kilómetros, o cada 5 a 10 años.
En Talleres Murillo, aconsejamos además realizar una revisión general del sistema de distribución cada 40.000 kilómetros o cada dos años, sobre todo si se circula frecuentemente en ciudad o en condiciones de calor o humedad.
¿Qué pasa si no se cambia a tiempo?
Si la correa se rompe con el motor en marcha, pueden doblarse las válvulas, dañarse los pistones e incluso necesitar un motor nuevo. En pocas palabras: no cambiar la correa a tiempo puede suponer una de las averías más costosas que puede sufrir un coche.
Síntomas que podrían indicar un problema
Aunque no siempre da señales, presta atención a lo siguiente:
- Ruidos inusuales: chirridos o zumbidos pueden alertar de tensión inadecuada o desgaste.
- Pérdida de potencia o dificultad al arrancar.
- Fugas de aceite en la zona del motor que puedan afectar a la correa.
- Luz de fallo motor: aunque no específica, puede aparecer si hay desincronización.
Checklist de mantenimiento preventivo
- Revisar el kilometraje desde el último cambio
- Consultar el manual del fabricante
- Atender a ruidos o comportamientos extraños
- Valorar las condiciones de uso (trayectos cortos, clima extremo…)
- Consultar con un taller especializado
Conclusión: una revisión a tiempo, un motor a salvo
La correa de distribución es una pieza que no avisa cuando está a punto de romperse, por eso su mantenimiento es preventivo, no reactivo. En Talleres Murillo estamos preparados para asesorarte, revisar y sustituir la correa cuando sea necesario.
Porque cuidar el corazón de tu coche es la mejor inversión que puedes hacer.